El jugador con más antigüedad en el plantel del Deportes Tolima, y el protagonista principal de la consecución de la segunda estrella en el escudo, aquel 9 de junio de 2018, en la final ganada ante Atlético Nacional, podría estar a punto de decir adiós de la institución 'Vinotinto y Oro': El lateral Danovis Banguero Lerma, el famoso hombre del 'Minuto 90+3'.

Según le confirmó Carlos González Puche, presidente de la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro), a 'El Combo Deportivo' de Caracol Radio Ibagué, Banguero Lerma pidió la asesoría de la agremiación para pedir el restablecimiento de su contrato, suspendido desde hace más de dos meses por parte del presidente del club, Gabriel Camargo.

Y no solo eso: Que se le paguen los salarios que hasta el momento dejó de devengar, debido a que la suspensión de su vínculo sería a todas luces ilegal, de acuerdo a la versión de González Puche, pues se cometió un acto de discriminación con el jugador de 30 años. El único del plantel con el que se procedió de esta manera, de los más de 30 que integran la nómina de Hernán Torres.

"Le hemos ayudado a redactar su comunicación al club, solicitando el restablecimiento de las condiciones contractuales en las que está vigente, con el tema de salarios, auxilios y arriendos. Banguero lo que está haciendo es advirtiendo al club y si no se da eso, puede terminar contrato con justa causa", dijo González Puche sobre este espinoso caso.

¿El adiós?

Pese a que le resta año y medio de contrato, para el titular de la agremiación es claro que las determinaciones del club frente al jugador se convierten en motivos suficientes para que dé por finalizado su vínculo y pueda ser fichado por cualquier otro club del FPC. Y, a decir verdad, ofertas al nacido en Villavicencio pero criado en el Cauca nunca le han faltado, ni en el país ni del exterior.

"En Colombia no hay esclavos, el jugador puede terminar libremente su contrato. Pero en el caso de Banguero hay unas causales y no se le puede impedir que pueda ejercer libremente el derecho al trabajo, como aparece en la Constitución Política", agregó el dirigente de Acolfutpro, en diálogo con el citado medio radial.

La única aparición de Banguero ante los medios había sido la del pasado 9 de junio, en la que decidió hablar de su situación y, en su momento, le dio un mensaje de tranquilidad a la afición, recalcando que su futuro estaba con el cuadro de la 'Tierra Firme'. Pero todo indica que el panorama cambió y por eso tomó la decisión de ser asesorado por la entidad de corte sindical.

"Era una reducción (de salario) un poco fuerte para mí. Yo propuse otra, entonces no le pareció acorde (A Gabriel Camargo, dueño del club) y decidió proceder legalmente. La verdad, en esto uno tiene que acostumbrarse a esto, porque es normal", le había comentado Danovis al espacio virtual 'La Kancha TV'.

Para González Puche, acostumbrado a ganarle litigios a Camargo Salamanca, la discriminación que según él cometió la institución contra el experimentado lateral es "fácilmente demostrable, porque los demás jugadores están trabajando, recibiendo salario y por lo tanto, en el único caso en el que no se pudo realizar fue en el Banguero. Además un abuso no pagarle su sueldo".

¿Qué sucederá?

Sobre el tema Banguero, el gerente general del club, Germán Darío Kairuz, dijo con anterioridad en los micrófonos de RCN Ibagué este jueves que estaban en negociaciones con el futbolista, para que pudiera presentar los exámenes de rigor y alistarse para el retorno. Algo que contrasta con la versión dada por Acolfutpro, que da a entender que dicho diálogo prácticamente no ha existido.

"Estamos en negociaciones, vamos a ver cómo hacemos el jugador pueda presentar los exámenes", le dijo Kairuz a 'Los Dueños del Balón', sin entregar mayores detalles como suele acostumbrar en sus entrevistas, siendo muy cauto y escueto en lo que manifiesta. Él ha sido la única persona del club en que ha hablado con algunos medios, ante el sorprendente silencio de Camargo.

Por último, González Puche fue claro en afirmar que lo que hizo Deportes Tolima no fue llegar a un acuerdo con el jugador, sino un intento de imposición, lo cual va en contravía con el artículo 51 del Código Sustantivo de Trabajo. Además porque no existiría permiso del Ministerio de Trabajo para aplicar la suspensión, hecho que le daría la razón al jugador en su reclamación.

"La suspensión lo que busca es que los jugadores se plieguen a las condiciones que ofrecen los clubes. Hay casos en que se ha llegado a acuerdos, concertar (...) La pregunta es: Si la situación es tan precaria y existe un motivo de causa mayor que es lo que alega el Tolima, ¿Por qué con el resto del plantel no se ha producido esta fuerza mayor?", puntualizó González Puche.