DEPORTES TOLIMA protagonizó penoso debut en la Liga BetPlay 1 2024: Fortaleza dio la sorpresa en el Murillo Toro y lo derrotó

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Peor no podía ser el debut de Deportes Tolima en la Liga BetPlay 1 2024. El onceno ‘Pijao’ cayó en su casa (1-2) frente a uno de los recién ascendidos a Primera División: Fortaleza CEIF, que sin miedo salió a hacer su juego y se llevó todo un potosí del césped del Manuel Murillo Toro, frente a la decepción de cerca de 7.000 fieles que acompañaron al local en lo que debía ser fiesta, pero se convirtió en funeral.

Los goles del defensa Daniel Rivera (30') y el delantero Adrián Parra (69'), sepultaron las aspiraciones del ‘Vinotinto y Oro’ de sumar sus primeros tres puntos en el torneo; o, como mínimo, de salvar una unidad. El penal convertido por el volante Yeison Guzmán (90+4') solo sirvió para la honrilla, en un partido que empezó a desequilibrarse tras el fallo desde el punto de castigo de Diego ‘El Tanque’ Herazo.

Con este precedente, la ‘tribu’ inició su presencia en la Liga, en la que deberá ir en su segunda jornada a Pasto: el viernes 26 de enero (6:10 p. m.), con el deber de recuperar lo perdido en su cancha. El dato es que es la tercera derrota seguida en el certamen, pues al término de los cuadrangulares de la Liga 2 2023, sucumbió frente a Águilas Doradas (0-1) y Junior (4-2) y regaló el tiquete a la gran final del FPC.

Sorpresivo golpe en el Manuel Murillo Toro

En el arranque del compromiso, la intención ofensiva fue del ‘Vinotinto y Oro’, que con rápidas transiciones y la aparición de sus extremos, en especial del cartagenero Kevin Pérez, intentó romper el esquema defensivo del elenco ‘atezado’. Sin embargo, con el pasar de los minutos, el visitante se asentó en el césped del Murillo Toro y logró contener el avance de los ‘musicales’, que bajaron su ritmo.

De hecho, entre los minutos 15 a 20, protagonizó dos incursiones claras en territorio ‘Pijao’ y en una de ellas, a los 18', en el que intervino el cancerbero Juan Camilo Chaverra para enviar al tiro de esquina. En respuesta, el anfitrión intentó recomponer los hilos en fase ofensiva y tuvo al mediocampista Yeison Guzmán como distribuidor, con la intención de jugar hacia la banda derecha, con Jeison Lucumí.

Sin embargo, cuando el cronómetro marcaba los 30' de juego, el cuadro foráneo se fue arriba en la pizarra. A través de la pelota detenida, el conjunto bogotano encontró el camino para vencer la resistencia del marco local, por intermedio del espigado defensor Daniel Rivera: el zaguero ganó en el juego aéreo, bajó el esférico y ante la pobre reacción defensiva impactó a portería contraria, para el sorpresivo 0-1.



Pese a ello, la respuesta del equipo de Ibagué no tardó: y a los 35', el volante Guzmán fue derribado en el área por Rivera, en una entrada violenta que dejó al paisa postrado en el gramado y daba la ilusión al anfitrión de igualar las acciones. Pero en la ejecución, el delantero Diego ‘El Tanque’ Herazo falló y con un tiro displicente se la entregó en las manos al portero Juan Diego Castillo, que conservó el cero.



Consumado el mazazo para Deportes Tolima

En el segundo periodo, Tolima salió con ímpetu a buscar la paridad, pero poco a poco se desinfló y llevó a que el técnico González hiciera modificaciones en su onceno. A los 62' relevó al extremo Jeison Lucumí y le dio paso a Álex Castro, mientras que en zona atacante puso a Brayan Gil por Herazo, de floja presencia. Con ello, buscó apretar en campo rival y generar flujo ofensivo, en pro de ir por la paridad.

Y al minuto de estar en cancha (63'), Gil desperdició de forma insólita lo que pudo ser el 1-1, pues en la línea de gol y ante las ‘barbas’ del cancerbero Castillo, la elevó y no fue capaz de convertir lo que era un tanto seguro. Y, así como reza el adagio popular: “el que no los hace...” y fue cuestión de minutos para que los de Ibagué padecieran el yerro y se alejaran, aún más, de igualar las acciones ante su fiel parcial. 

Sucedió a los 69', cuando en una especie de contragolpe, aprovechando el deficiente retroceso en defensa del ‘Vinotinto’, apareció el delantero Adrián Parra: viejo verdugo del dueño de casa, que le ganó el mano a mano al volante Juan Pablo Nieto y, tras eludir al golero Chaverra, definió a placer para el lapidario 0-2, que dejó en silencio a los cerca de 7.000 espectadores que concurrieron al ‘Coloso de la 37’.



Gil, en un nuevo mano a mano, volvió a desperdiciar lo que era esta vez el descuento en el juego, en una demostración más de sus consabidas limitantes en la delantera. Y con ese panorama, con más desespero que orden en su propuesta, el local intentó  reducir distancias, frente a un adversario ordenado en su cuartero posterior y que jugó, en cierto modo, con la necesidad de los dirigidos por González.

Pero a los 90+2', una mano en el área de Alejandro Moralez, cuando fue a disputar un balón por las ‘nubes’, fue decretada como penal por el árbitro central Ferney Trujillo, a expensas del VAR. En el cobro, el mediocampista Guzmán tomó la responsabilidad de ejecutar el disparo desde los 12 pasos y con un remate al ángulo superior izquierdo vulneró, por fin, al arquero Castillo: que se lanzó al lado contrario.



El tanto de la ‘tribu’ fue apenas una ilusión, pues pese a que tuvo la generosidad del silbato en la reposición, el impulso no alcanzó para salvar al menos un punto en su reducto. Un golpe duro para los hinchas que esperaban arrancar con pie derecho el campeonato, pero se devolvieron a sus casas tristes y pensativos con la irregular expresión futbolística expuesta por un colectivo que no estuvo a la altura.

Foto: Club Deportes Tolima










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