Imaginemos la siguiente postal: luego de abonar una entrada o presentar el carnet de socio, se accede, junto a miles de aficionados, a los asientos del estadio. La marea de gente es poderosa, el sonido es brutal y ensordecedor, pero no de mala manera, sino que se articula junto al color y el humo, la pasión encendida. 

La bandera del equipo se desenvuelve desde muy arriba y, al ayudar su descenso con los brazos en alto, la tela gigante envuelve la totalidad de las plateas. Los equipos salen a jugar, los gritos son cada vez más desaforados y los jugadores comienzan a rodar el balón.

Estas son una de las tantas sensaciones que atraviesa el público al asistir a un partido de fútbol. Si se trata de un clásico entre equipos, las emociones y la expectativas aumentan, incluso quienes utilizan el código promocional BetPlay. Entonces, no resulta descabellado pensar en el tipo de situaciones que ofrece el fútbol cuando lo que está en juego es la pasión, el status y la posición en las tablas.

Para reafirmar estas cuestiones, revisemos algunas fuentes interesantes. El periódico británico The Sun ha catalogado el superclásico entre Boca y River como la experiencia deportiva más intensa del mundo. 

Por su parte, la revista de fútbol Four Four Two, también británica, lo describe como el clásico más grande del planeta, mientras que el periódico The Mirror genera expectativa con una visión emocionante: es el clásico más feroz del mundo.

Para liquidar la cuestión, The Observer se anima a sugerir que el superclásico entre Boca y River se encuentra entre los 50 espectáculos que hay que ver antes de morir. Que lo anterior sirva de antesala, que ayude a prender las alarmas y reservar el día en el trabajo o en la universidad, porque no hay razón que valga para perderse este duelo de titanes argentinos.  

En octubre de este 2023 se enfrentan Boca y River, dos de los clubes más icónicos de la Argentina y del fútbol mundial, pues por ellos han pasado sobrados ejemplos del estándar más alto en cuanto a figuras del fútbol.

Desde la leyenda de Diego Armando Maradona y el goleador histórico Martín Palermo, hasta Juan Román Riquelme o el arquero Oscar Córdoba, resultan inacabables los íconos legendarios del club de la zona sur de la Capital Federal, La Boca.

Pero atención, porque River ha demostrado a lo largo de su historia tener una cantidad de figuras impresionantes, como el goleador y el diez definitivo Ariel Ortega. 

Así como el Beto Alonso ha tenido las mejores performances bajo la camiseta blanca con una banda que cruza en diagonal el color rojo. Son legendarios los goles que le realizó a Boca en el campeonato 85-86. 

Pero no nos quedemos con los años 80. La actualidad presenta casos impresionantes, como una de las estrellas más destacadas del mundial de Qatar 2022, Julián Álvarez. Artillero destacado, antes de jugar en el Manchester City, logró a su joven edad la Recopa Sudamericana y la Copa Libertadores en Madrid con el club de los millonarios. ¿Gallinas? Mejor no provocarlas.

El partido se disputará en el legendario estadio ubicado en La Boca llamado La Bombonera, ese particular espacio, casi mítico, inaugurado en los años 40. El contexto bajo el cual sucederá esta gran fiesta es la Copa de la Liga.

Para tener un poco más de contexto, he aquí el historial de los enfrentamientos entre Boca y River. En total, se han disputado un total de 259 encuentros de manera oficial entre ambos rivales. De estos, Boca ha ganado 91 partidos, mientras que River ha alcanzado la victoria en 85 partidos. Además, han empatado una cantidad increíble de veces: 84 ocasiones. 

Estadísticamente, Boca lidera el historial, con seis partidos más arriba que River. Esta rivalidad sin duda alguna se ha extendido a diversas competencias y no solo pertenece a un contexto de torneo local. Por ejemplo, una de las finales más importantes del siglo se dio en nada más y nada menos que en el estadio Santiago Bernabeu, donde Boca terminó derrotado a manos de River.

Aún así, en los últimos diez superclásicos, el panorama ha sido desafiante para ambos equipos, rivales eternos.