El llamado de alerta que lanzó el pasado miércoles Deportes Tolima en sus redes sociales, sobre la pobre venta de abonos para los cotejos de local en la Liga BetPlay 1 2020, no ha traído -hasta el momento- los resultados esperados en los hinchas, a juzgar por el segundo reporte entregado este viernes, que dejó a más de uno aburrido.

De acuerdo con la información publicada por la jefatura de prensa, solo 230 hinchas han adquirido -a la fecha- su paquete para acompañar al equipo en la fase regular del torneo, solo 60 más que en el primer registro, que indicaba en su momento la venta de apenas 170 combos de partidos. Esto a dos semanas del estreno en casa, ante Independiente Medellín.

De la tribuna que más abonos se han vendido es la de Oriental, con 69 paquetes; seguida de Occidental General, con 46, y Lateral Sur, de la que han comprado solo 42. Le siguen Occidental Numerada, con 37 afiliaciones y por último Lateral Norte, con escasos 36 abonos vendidos al público, siendo este dato a todas luces desconcertante.

Tal parece que la estrategia dada a conocer por los gerentes Germán Kauiruz y Patricia Hernández está convirtiéndose en un sonoro fracaso, ante la imposibilidad de convencer a los seguidores del club a hacer presencia de manera masiva en los expendios, más allá de los valores fijados, que resultarían cómodos en cualquier otra plaza, los beneficios prometidos y la venta anticipada.

Esta no sería la primera vez en que no se cumplirían las expectativas por parte de la dirigencia, que no ha encontrado la fórmula para revertir los malos resultados en este sentido. Para la Liga 2 2019 apenas se vendieron algo más de 700 abonos, menos que en 2018, cuando en ambos semestres la cifra superó los 1.000. Números que en otros clubes hubieran obligado a una reestructuración.

Y es que las cifras reportadas por la institución han sido el hazmerreír de hinchas de otros equipos del fútbol profesional colombiano, quienes se cuestionan sobre los motivos por los cuáles en Ibagué la iniciativa de los abonos está lejos de dar resultados óptimos. Y deja muy mal parada a la ciudad, que carga con la fama de ser apática al balompié.