El arbitraje del nortesantandereano Jorge Guzmán, designado por la Comisión Arbitral de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) para dirigir el crucial encuentro entre Junior y Deportes Tolima, podría resumirse en una sola palabra: Polémico.

El silbato fue el gran protagonista del empate (1-1) de este domingo, por la tercera fecha del Grupo B de los cuadrangulares semifinales de la Liga Águila 1 2019, en el estadio Metropolitano de Barranquilla.

Guzmán le pitó un penal dudoso al 'Vinotinto y Oro', pero también -hay que decirlo- le perdonó la expulsión al delantero chocoano Marco Pérez y de paso la amarilla -como mínimo- al local Teófilo Gutiérrez, por el 'rifirrafe' que protagonizaron tras la sanción del cobro.

Primera polémica

A los 63' cayó en el área 'Musical' el ariete Luis Díaz, quien era marcado por el zaguero Sergio Mosquera. A juicio del juez, hubo una carga en la rodilla derecha del ariete por parte del visitante, por lo que no dudó en sancionar la infracción en favor del vigente campeón de la competición.

Sin embargo, para una buena parte de telespectadores hubo simulación del guajiro, quien al sentir la presencia del rival al parecer se dejó caer en el área chica. Eso sí: La reacción de 'Checho' fue airada, lo que le valió la amonestación por parte de la autoridad del encuentro.

Segunda polémica

Se registró una fuerte discusión entre Pérez y Teófilo. El local le reclamó al chocoano por sabotear el punto penal, por lo que lo empujó. Pero la respuesta de 'El Comandante' fue contundente: Otro empujón que mandó a Gutiérrez al piso, y por lo cual solo vio la 'pálida'. En tanto, el ariete juniorista se fue en blanco.

Como si fuera poco, Guzmán debió repetir el cobro ejecutado a los 66' por el volante Luis Narváez, debido a la invasión del área por parte de Díaz. Sin embargo, dejó seguir y con ello el dueño de casa se fue en ventaja en la pizarra.

Tercera polémica

En lo que sí acertó fue en validar el tanto de la igualdad por parte de la visita. Sucedió a los 90+2' cuando el defensa tumaqueño Julián Quiñones embocó el balón al fondo de la portería sur del Metropolitano, pero por delante de él estuvo el atacante Diego Valdés haciendo 'pantalla'.

Pese a los reclamos, el delantero estaba habilitado por un jugador local en el piso: El lateral Marlon Piedrahita, quien se tropezó con su marca, Maicol Balanta. Eso hizo que la jugada no fuera invalidad por el asistente uno, el santandereano Wílmar Navarro, quien la declaró legal.

El dato

El arbitraje de Guzmán se dio justo después del partido que ganó la 'tribu' (1-2) como visitante ante Atlético Nacional, el pasado jueves, en el que también se determinó un controvertido penal: En esta oportunidad favorable al foráneo, que convirtió Marco Pérez.