A diferencia de 2012, cuando se convirtió en el goleador de Deportes Tolima en la temporada y de paso se llevó el botín de oro de la Liga 1, el delantero paraguayo Robin Ariel Ramírez no pudo cuajar una campaña similar en este 2015. 

Por ello, su salida del 'Vinotinto y Oro' sería inminente, ante el deseo de algunos de contar con su continuidad. Y porqué no decirlo, la tristeza de una parcial que guardó un cariño especial por su 'superhéroe' favorito, que se diluyó lentamente.

En efecto, el ariete guaraní de 26 años no continuaría con la tribu para el próximo año, al terminarse su vinculación laboral el 31 de diciembre y -hasta el momento- no llegar a un acuerdo con el presidente del club, Gabriel Camargo para una probable renovación.

"Aún no se sabe. Yo hablé con ellos (Tolima) pero no me contestaron y creo que ya no sigo, porque ya me estoy yendo a Paraguay. Si puedo seguir o no depende del senador. No pedí nada para renovar, el mismo contrato era. Aunque si no me dijeron nada es porque no van a seguir conmigo", dijo Robin a El Rincón del Vinotinto.

Sin embargo, el gerente del club, Ricardo Salazar, indicó al programa El Alargue de Caracol Radio que su partida no está 100 por ciento confirmada. "No lo hemos descartado del todo. Es un jugador importante, viene de una lesión, pero hay alguna posibilidad de seguir hablando con él".

Robin, con el botín de oro que lo acreditó como goleador del primer semestre de 2012.

Y es que en esta ocasión fue una lesión la que cambió todo. El pasado 8 de abril, tras una semana en departamento médico, se confirmó que producto de fuerte molestia de juanetes en su pie izquierdo, el atacante debía ser intervenido quirúrgicamente. Fue un duro golpe para el técnico Alberto Gamero.

A partir de entonces Robin nunca más volvió a ser el mismo; ese que con siete goles en 13 partidos ilusionó a la afición en el primer semestre del año con una producción arrolladora.

Tras 124 días de para, Ramírez regresó a las canchas. Pero en la segunda parte del año solo logró anotar un gol y al final perdió la lucha por la titular ante Marco Pérez; quien pese a no ser empleado como delantero por Gamero, fue utilizado allí ante el bajo nivel mostrado por el 'paragua'. 

En su cuenta de Twitter, Ramírez agradeció el apoyo recibido por la parcial musical con un corto pero sentido "Gracias Ibagué, siempre en mi corazón". 

Además de su amor por el 'Vinotinto', el 'Niño maravilla' quedó por siempre atado a Ibagué. Su esposa, Ángela Camacho es de la ciudad, al igual que su pequeño hijo, Maxi.

Aunque no se sabe cuál será su destino, si de pronto no se da su adiós, su nombre suena para reforzar las filas del campeón paraguayo, Olimpia. Recordemos que el pase de Robin pertenece a Pumas de México hasta fin de año, club al que fue vendido tras su primera estancia en la capital tolimense.

"De mi parte agradecido con todo. Sé que no salieron las cosas, pero así es el fútbol y hay que seguir trabajando. Me encantaría quedarme a ratificar, porque quedé en deuda", puntualizó el artillero.

Ramírez se sumaría a su compatriota, el también delantero Rogerio Leichtweis, quien hasta ayer estuvo vinculado al equipo de la 'Tierra Firme'.