Por: Mario Alejandro Rodríguez

Cuando se pensaba que los ibaguereños tendrían para los Juegos Deportivos Nacionales del año entrante un estadio terminado, con estructura y estética radicalmente diferentes a la actual, la realidad es que los recursos destinados por las autoridades locales y nacionales alcanzarán -apenas- para hacer algunas de las múltiples adecuaciones que necesita el escenario deportivo.

Así lo dio a entender el alcalde de Ibagué, Luis H. Rodríguez, en la socialización de los diseños del Manuel Murillo Toro, reunión efectuada en la Biblioteca Virtual de la ciudad. Aunque se invertirán cerca de 14 mil millones de pesos de cara a las justas, estos dineros sólo representan una pequeña parte de los 59 mil millones que costaría dejar OK al 'Coloso de la 37'. Todo de acuerdo con lo proyectado por Rigoberto Rugeles y el arquitecto Manuel Villa, los responsables de los planos.

Según Rodríguez, Coldeportes hará un aporte de 7 mil millones de pesos, mientras que su administración pondrá $5 mil millones más, que sumados con los $2 mil millones que dará la Gobernación del Tolima representan en sí toda la inversión disponible para el estadio a 2015.

Con estos recursos -explicó el mandatario- se haría un cambio de gramilla y ampliación del campo de juego, y además, un reforzamiento estructural en la tribuna occidental, que en una parte sería demolida para cumplir con la normativa FIFA en cuanto a camerinos. A su vez, se llevaría a cabo la instalación de silletería en esa localidad y en las de oriental y sur, como también los procesos de impermeabilización. 

En el césped, al  que se le invertirían 2 mil 300 millones de pesos, los trabajos podrían demorar entre tres y cuatro meses; en tanto que lo estructural demoraría unos ocho meses más. "Ahí están los términos y los tiempos", indicó el burgomaestre sobre el cumplimiento del cronograma. Añadió, eso sí, que la pista de atletismo desaparecería con el ensanchamiento del campo de juego, y que buscarán no afectar la actividad profesional del Deportes Tolima.

El visto bueno para lo que se llamó la primera fase de remodelación del estadio sería dado en aproximadamente 15 días por parte de Coldeportes. Posteriormente vendría la firma de convenios interadministrativos para el traslado de recursos, y acto seguido sería presentada la licitación. En este orden de ideas, las obras tendrían fecha de inicio a finales de diciembre o comienzos del 2015.

Sin embargo, quedarían pendientes un número considerable de aspectos que requiere con urgencia el Murillo Toro. Uno de ellos, que más inquietó a la crónica deportiva durante la socialización, es que los trabajos previstos a hacerse en la primera fase de la remodelación no plantean la reconstrucción de las cabinas de prensa, que a la fecha se caen -literamente- a pedazos.

Tampoco prevé una labor de intervención en los exteriores del Murillo Toro, que registran un estado paupérrimo. Sobre esta problemática, El Rincón del Vinotinto le preguntó al alcalde sobre lo que tiene presupuestado la administración en este caso, pero la respuesta fue evasiva, limitándose sólo a la elaboración de los diseños para posteriores recursos y no a una reacción inmediata sobre una realidad inocultable y vergonzosa (Ver: El Murillo Toro, un año de completo abandono). 

"Como el Gobierno no nos da los 59 mil millones de pesos para hacer todo, nos toca por fases. Creo que hemos dado un paso importante para el estadio que es tener un diseño que va a tener la aprobación de FIFA y Coldeportes. Iniciamos la primera fase y esperamos continuar con las fases que se requieran para terminarlo como lo sueñan todos", indicó el alcalde.

Otros puntos

Según los diseños presentados por Villa y Rugeles, en los exteriores del Murillo Toro se haría -en fases posteriores- una importante transformación urbana, con espacios para la recreación de grandes y pequeños. La misma tendría un valor cercano a los 9 mil 800 millones de pesos, con la adecuación de una zona para la práctica del 'Skate'.

Teniendo en cuenta ello, los parqueaderos de los sectores de occidental y oriental desaparecerían, no así la famosa cancha Marte, que se mantendría tal cual funciona. Por su parte, la capacidad de espectadores se vería reducida con la instalación de sillas en todas las tribunas y quedaría en 23 mil 582, con 249 cubículos para la prensa.

Del mismo modo, se planea mejorar el sistema de iluminación del escenario deportivo, actualmente en 750 lumen. Este rango aumentaría a más de 2 mil, lo que garantizaría la transmisión de eventos para televisión en alta definición.

Por último, en los diseños quedó estipulado que la cubierta que tendría el 'Coloso' sería tipo textil, al mejor estilo del estadio Pascual Guerrero de Cali, que no exige mayor reforzamiento estructural en las vigas; en comparación con un techado metálico.

Para Luis H, en dos años el 'Coloso de la 37' tendría que estar completamente remodelado, aunque se desconoce con qué recursos se terminarían las obras planeadas, si con la ayuda del Gobierno Nacional o a través de los Órganos Colegiados de Administración y Decisión, OCAD, que le da viabilidad a proyectos de inversión en el país financiados por el Sistema General de Regalías.

En ese sentido fue claro el arquitecto Villa, quien pidió no "perder la sinergia en la realización de los trabajos", para que los diseños no pierdan vigencia, y por ende no se tengan que gastar más recursos en la contratación de unos nuevos.